Recuperarte

No existe una postura ideal como tradicionalmente nos han hecho pensar. El dolor es una alarma que significa que algo va bien, es decir, que tu sistema nervioso central (cerebro) te está avisando. En la mayoría de ocasiones, ese aviso se traduce en que debes “ejercitar más esa parte de tu cuerpo” para evitar una posible lesión. Recuerda, el cuerpo está diseñado para el movimiento.

Sí, siempre está indicado fortalecer los músculos afectados directa o indirectamente mediante ejercicios no solo después de la intervención sino antes, para evitar una atrofia muscular y/o disfunción que prolongue en exceso el tiempo de la recuperación.

Lo más importante es hacer una valoración funcional, saber el origen y actuar de forma específica a través de una plan de rehabilitación que conste de fisioterapia y ejercicio.